El Raudal de Angosturas hace parte del Escudo Guyanés, conocido como las "rocas más antiguas del mundo". Miles de millones de años de historia han tallado un paisaje impresionante que puedes conocer en la Sierra de la Macarena, la primera reserva natural del país, y el lugar donde los Andes, la Orinoquía y la Selva Amazónica se dan cita para crear un impresionante escenario de biodiversidad y belleza.
Aeropuerto de Bogotá a la hora de salida del vuelo.
Aeropuerto de Bogotá a la hora de llegada del vuelo.
4 días.
Tu día empieza muy temprano en Villavicencio, allí tomarás una pequeña avioneta de apenas 5 pasajeros en la cual harás un corto pero emocionante vuelo donde podrás observar desde las alturas el imponente sistema montañoso de la Sierra de la Macarena. Una vez en La Macarena visitarás el Jardín Botánico, una reserva ecológica ubicada a apenas 20 kilómetros del casco urbano. Allí te estarán esperando con un delicioso almuerzo de bienvenida con productos extraídos directamente de la huerta. En el Jardín es posible realizar un sinfín de actividades, todas enfocadas en la conservación y la restauración de la flora y fauna nativa. Harás avistamiento de aves, senderismo, visita a la huerta y el vivero, fotografía, entre otros. Finalmente, regresarás al pueblo para acomodarte en tu hotel y descansar.
El Río Guayabero, que entre costa y costa alcanza los 200 metros, al encontrarse con las formaciones rocosas del Escudo Guyanés, reduce su caudal a escasos 40 metros. Este fenómeno nos ofrece una vista espectacular, llamada Cajón del Raudal, que solo puede ser apreciada en los meses de verano, entre diciembre y mayo. Cruzarás en un lancha en medio de las paredes del "cajón" apreciando no solamente la impresionante formación rocosa sino también la diversidad de aves de la región. Del otro lado del cajón se pueden apreciar los petroglifos que han dejado a los largo de los años las culturas que habitaron la región. En el Raudal también se encuentra la conocida Ciudad de Piedra, un conjunto de rocas de diferentes formas y tamaños, esparcidas por un amplio campo, que dan la sensación de estar recorriendo una extraña ciudad con sus edificios y avenidas. Para terminal el día podrás tomarte un refrescante baño y regresar al hotel para descansar.
Este día irás río abajo, aproximadamente 20 minutos en lancha, hasta el puerto donde comienza la vereda La Cachivera. En esta vereda la comunidad ha generado diversos procesos asociativos para la conservación y el mantenimiento de los ecosistemas. El recorrido empieza a caballo por las sabanas, para luego montarnos a una lancha sin motor llamada "potrillo", en la cual recorrerás la Laguna del Silencio, que como su nombre lo indica es un lugar de gran tranquilidad, propicio para escuchar las aves, relajarse y reconectarse consigo mismo. Después harás una corta caminata de avistamiento de aves, donde el guía te contará de la enorme diversidad de la región y de los procesos de restauración que se han logrado en la zona. Finalmente llegarás al punto de almuerzo donde disfrutarás de un plato típico de la región y podrás descansar, antes de emprender el camino de regreso, primero caminando, luego a caballo y finalmente en lancha.
Para empezar este último día disfrutarás del famoso amanencer llanero desde el río y qué mejor manera que ¡desde un kayak!. Te recogerán en el puerto del pueblo y navegarás río arriba hasta el lugar donde te recogerá el kayak. Una vez allí te pondrás tus implementos y empezarás el recorrido a la inversa, es decir, río abajo, en tu propio kayak. Todo el tiempo estarás acompañado de la lancha y de un guía especializado para garantizar tu seguridad. Ten en cuenta que es temporada de verano, por lo cual el río estará más tranquilo de lo habitual, así que relájate y disfruta de la aventura con todas las medidas de seguridad necesarias. Finalmente, regresarás al pueblo y tomarás tu vuelo de regreso a Villavicencio.